Ayuda se efectuó producto del terrible incendio que afectó a la comunidad franciscana y cristiana de la Región de Tarapacá el pasado 11 de octubre.
Por: Pía Aubert, Iª Brigada Aérea
120 años de historia de la iglesia San Antonio de Padua de Iquique que fueron consumidas en su totalidad por el fuego el pasado viernes 11 de octubre y que hoy transforma el lugar en grandes recuerdos para toda la comunidad de la Región de Tarapacá. Es por ello, que el domingo 13 de octubre personal de la Iª Brigada Aérea participó voluntariamente en la remoción de escombros del lugar.
Sin dudarlo, y a través del llamado de las autoridades los Aviadores Militares de la Fuerza Aérea demostraron el compromiso con la ciudadanía y ello fue reflejado el pasado domingo con esta noble actividad que consistió en apoyar a mover escombros, rescatar objetos de valor patrimonial y cargar los restos de estructuras de pino Oregón que fueron quemadas por el fuego.
La iglesia San Antonio de Padua, convento de orden franciscana fue construida entre los años 1899 y 1904 y fue declarado Monumento Nacional en la categoría de Monumento histórico el 25 de octubre del año 1994.
Durante la jornada de limpieza en el sector, los Aviadores Militares recibieron la visita del Obispo de la Diócesis de Iquique, Monseñor Isauro Covili, quien destacó que esta pérdida significó un tremendo dolor para la comunidad en general y poder contar con Instituciones como la Fuerza Aérea de Chile en este momento es de gran apoyo.
“Esto ha sido un desastre y a la vez doloroso para la comunidad, pero en medio del dolor y el duelo donde hay gente vinculada con la congregación franciscana que ha participado por más de un siglo en la devoción por San Antonio de Padua. Estos días hemos visto tantas muestras de cariño y cercanía de la gente, de generosidad y se nota en todas las ayudas como lo demostrado por los amigos de la Fuerza Aérea. Eso ciertamente hay que agradecerlo. Por otro lado, la fe y la vida de la comunidad continúa intacta con su fe a pesar de estos desastres”.