Por Claudia Castro, Departamento Comunicacional
Durante los primeros días del mes de agosto, y en el marco del Consejo de Política Espacial, la Fuerza Aérea de Chile dio inicio a una etapa que sin duda marcará el proceso de implementación del Sistema Nacional Espacial: el lanzamiento de la licitación del Centro Espacial Nacional (CNE), es decir, la búsqueda de quien pueda proporcionar la arquitectura y herramientas técnicas necesarias para planificar su construcción y así poder continuar avanzando de manera efectiva en esta importante iniciativa que busca convertirse en un aporte fundamental para el desarrollo tecnológico, de generación de conocimiento y promoción de talento en el ámbito espacial para el desarrollo de Chile y de todos sus habitantes.
El Centro Espacial de Santiago se ubicará específicamente en la comuna de Cerrillos y contará con una superficie aproximada de 6 mil m2 donde se emplazarán salas de conferencias abiertas a la comunidad científica, universitaria y centros de negocios. También contempla la habilitación de un Laboratorio de investigación y desarrollo satelital, además de un Centro de procesamiento de datos recopilados por los satélites, y muestras interactivas para toda la comunidad como colegios e institutos, entre otros.
Se trata del primero de un total de tres sitios que conformarán el Sistema Nacional Espacial (SNSat), uno de los pilares fundamentales del Sistema Nacional Espacial que en su conjunto permitirán al país reducir la brecha digital y tecnológica, contribuyendo a que Chile cuente con una estructura económica más digital y sostenible, y con ello al incremento de la calidad de vida y seguridad de las personas a lo largo de todo el país.
Estamos hablando de un programa vanguardista que además del CNE contempla la implementación de dos centros espaciales regionales para el año 2023: la Estación Terrena Transportable en la Región de Antofagasta y la Estación Terrena Austral en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, que buscarán también potenciar la investigación y desarrollo, además de la creación de clusters regionales y así establecer contacto con las empresas y centros locales.
Un trabajo en equipo de distintos ministerios y de la Fuerza Aérea de Chile que ha hecho posible dar este gran paso para nuestro Sistema Nacional Espacial, que permitirá hacer de Chile un polo científico, tecnológico y espacial en la región. Al tiempo de integrar las capacidades del mundo público, académico, científico y privado con el propósito de ampliar los ámbitos de nuestro conocimiento y las fronteras físicas para el desarrollo.