Tras la firma del Presidente Carlos Ibáñez del Campo, la actual Fuerza Aérea de Chile, se crea como un arma de la Defensa Nacional, nueva e independiente, al fusionar los servicios aéreos del Ejército y la Armada de Chile.
El Comodoro Merino Benítez, su primer Comandante en Jefe, es recordado como el verdadero arquitecto del sistema aeronáutico nacional, al crear la Dirección de Aeronáutica, el Club Aéreo de Chile, el Gabinete de Fotogrametría Aérea, la Línea Aeropostal y la primera fábrica de aviones Curtiss que hubo en el país, entre numerosas otras obras.
Una historia construida sobre la base de sueños hechos realidad, gracias al sacrificio de los pioneros de la aviación militar chilena, que llevaron a la creación de la Escuela Aeronáutica Militar, el 11 de febrero de 1913, con hitos gloriosos como el primer vuelo militar en el país realizado por el Capitán Manuel Ávalos Prado, el cruce de la Cordillera de Los Andes del Teniente Dagoberto Godoy en 1918 o el raid a Brasil, del Capitán Diego Aracena en 1922, entre otros.
Hoy, la Institución se encuentra en la ruta de los 100 años, manteniendo el compromiso con su rol principal en la defensa y su contribución al desarrollo nacional, enfocando actualmente sus esfuerzos en aportar a la consolidación de Chile en el espacio por medio del Sistema Nacional Espacial.
Así, la Fuerza Aérea de Chile continuará forjando su futuro utilizando para ello los caminos del aire y del espacio.